Con el objetivo de romper barreras culturales que a veces impiden la
lactancia materna y aumentar así las tasas de esta saludable práctica, un grupo
de expertos de la Universidad de Sheffield ha puesto en marcha una curiosa
iniciativa. Ofrece vales de compra de hasta 200 libras esterlinas (unos 238
euros) a mujeres que viven en zonas con pocos recursos económicos (en Reino
Unido), donde el biberón es la principal vía de alimentación de sus bebés. La
condición de este 'trato' es que, en lugar del alimento de fórmula, las madres
opten por darle el pecho a sus pequeños.
El estudio incluye a 130 madres de Yorkshire y Derbyshire,
comunidades donde, según los investigadores, la lactancia materna está
estigmatizada. "Suelen pensar que amamantar en público es vergonzoso,
incluso en su propia casa", afirma Mary Renfrew, asesora de este proyecto
y profesora de salud infantil y materna en la Universidad Dundee. "Algunas
aseguran que es inmoral porque los pechos tienen un significado sexual [...]
Creen que serían objeto de las miradas de gente que consideran que están
haciendo algo malo".
A pesar de la originalidad de esta
iniciativa, los responsables de la misma son conscientes de que podría provocar
la hostilidad de otras comunidades en las que la lactancia materna es más
habitual y también entre aquellas mujeres que han tenido dificultades,
"que pueden pensar que ofrecen vales como una forma de soborno o
coacción". Como respuesta, la principal autora del estudio, Clare Relton,
compara la idea con el programa Healthy Start, que ofrece vales a las familias
desfavorecidas. "No dar el pecho es una causa de desigualdad".
Según un informe de Unicef del año pasado,
en el que Renfrew participó, la lactancia materna
protege a los bebés de problemas intestinales, respiratorios, infecciones del
oído... Además, "también protege a las mujeres del
cáncer de mama", agrega.
Sin embargo, a pesar de los innumerables beneficios
que tiene tanto para el bebé como para la madre, en Reino Unido sólo el 35% de
las mujeres le siguen dando el pecho a sus hijos a los seis meses de vida, tal
y como recomienda la Organización Mundial de la Salud (OMS).
Los expertos afirman que el Servicio
Nacional de Salud (NHS) se podría ahorrar más de 40 millones de libras
esterlinas al año (unos 47 millones de euros) si más mujeres
se animasen a seguir el consejo de la OMS.
Concretamente, este programa piloto se
llevará a cabo en zonas donde se calcula que sólo el 25% de las mujeres
amamantan a sus bebés a las seis semanas de vida (a estas alturas, la media
nacional se sitúa en algo más del 50%).
Como explican los artífices de este
proyecto, se ofrecerán vales de
40 libras esterlinas (aproximadamente 47 euros) a aquellas mujeres que den el
pecho a su pequeño dos días después de nacer; otros 47 euros en vales si
continúan haciéndolo a los 10 días; y otro a las seis semanas. Los dos últimos
vales están reservados para otras dos metas: los tres meses y los seis meses de
vida.
El equipo reconoce que comprobar la
veracidad de este cumplimiento podría ser un problema. Se le pedirá a la madre
firmar una declaración en la que garantice que está amamantando a su bebé.
Además, un médico y una consejera sobre lactancia materna le harán visitas con
frecuencia.
Para Relton, si este proyecto piloto
funciona, podría extenderse a nivel nacional.
También será necesaria la inversión en
personal especializado que asesore y ayude a estas mujeres que desconocen esta
vía de alimentación. "Muchas mujeres dejan de dar el
pecho porque no consiguen la información y el apoyo necesarios".
El
periódico elmundo.es 2013-11-15